Adios Guadalaviar

Hace justo 20 años fuí por primera vez a Guadalaviar, su ayuntamiento me habia tocado en suertes y tuve que tomar una importante decisión: quedarme allí o volver a casa con mi yo y con mis circunstancias. Al final opté por esto último, con mucha pena ya que aquello era para lo que tanto esfuerzo habia invertido preparándome, pero en ese momento creí que lo mejor era continuar con mi otro trabajo y mi otra vida de aquí. Para no perder la plaza, tuve que ir allí a tomar posesión y en el mismo acto pedir la excedencia. El lugar me encantó, era bello, tan verde, tan agreste y puro y por otro lado su alcalde D.Camilo me tentaba con las ventajas de vivir en un lugar tranquilo, con casa y calefaccion y con todas las facilidades que esa vida alejada del mundanal ruido me podía ofrecer, asi que sus cantos de sireno y mis ganas de volar me ponían muy difícil firmar y aceptar el cese, por ello con mucha pena me fuí de alli, mirando todo el rato por el retrovisor mientras me alejaba perdiéndolo de vista y pensando en que algun dia tendría que volver. Los años pasaron cargados de historias y añorando Guadalaviar. Cuando tenia momentos bajos me acordaba de aquel lugar y me ilusionaba con volver allí para empezar una nueva vida. Ahora las ambiciones del trabajo van quedando atrás, hace 10 años que mi vida es muy dichosa y deseo seguir viviéndola asi, además, no me quedan muchos años para jubilarme. Por ello y como las cosas se ven de otra manera, necesito dar paso a otras vivencias en las que Guadalaviar ya no ocupa un lugar preferente. No es momento de arrepentirme sino de ilusionarne con disfrutar el presente y aprovechar a tope lo que el futuro me presente por delante. Lo mismo que dejas atrás lugares agradables donde has vivido, el colegio, la universidad, la primera casa, las personas que ya no están aqui, allí dejé a mi ayuntamiento que seguro seguirá en pié funcionando por muchos años gestionado de maravilla por alguien tan ilusionado como yo estaba en aquel lejano 1995. Adios, Guadalaviar, adios para siempre, adios.