Encuentro Topaki de Caritas

Del bus numero 2 de los 6 que llegaron a Vitoria bajaba mi prima. Besos y abrazos y un monton de presentaciones de compañeros suyos que son gente maravillosa que dedica todo su tiempo y sus mejores intenciones a quien mas lo necesita, mi prima la primera. Nos instruimos sobre el penoso estado de los derechos humanos en el mundo con los conferenciantes que tuvimos en el encuentro y la speaker italiana nos transmitió ánimos de rayos de esperanza en la construir un mundo mejor a partir del voluntariado que es lo unico que funciona de verdad. Un par de practicas con juegos entre quienes estabamos en el patio bañado por un cálido sol de otoño nos hicieron meditar sobre la codicia de quienes se quedan con los medios y los derechos de los demas y sobre la imprescindible necesidad que tenemos de que alguien nos preste su ayuda cuando más lo necesitamos, y esas experiencias nos dejaron dentro un calorcillo humano muy reconfortante que te llena de todo acercándote todavia más a la gente que te rodea. Mientras comiamos un lunch impecablemente servido y presentado por una empresa de Caritas formada por gente que estuvo en exclusion social, piensas en lo diferente que es formar parte de esta organizacion de gente auténtica y real de quienes forman un partido politico cuya principal intención es buscarse un opíparo medio de vida, vivir en su mundo exclusivo y limitarse a interesarse solo un poco de este otro mundo que pasa necesidad una vez cada cuatro años... Estoy deseando volver a encontrarme con toda esta gente que te hace sentirte tan bien y te llenan de felicidad demostrandote su cariño y su calidad humana.