Una de bolos

Después de misa y tomarnos el vermut nos hemos acercado a la pista de bolos para presenciar a los tiradores en el ancestral campeonato de bolos por San Miguel, en el que participa todo el mumdo en diferentes modalidades y hasta los niños tiran que además lo hacen con un estilazo impresionante. No hemos podido resistirnos a tentar a la suerte, ya que técnica no tenemos, y nos hemos apuntado al campeonato de bolos. Hemos esperado nuestro turno nerviosos y tras unas instrucciones bien dirigidas y un tiro a modo de prueba, hemos agarrado el antiguo bolo de madera tallada y lo hemos lanzado con todas nuestras fuerzas a lo alto con el fin de que tras una graciosa parábola cayera justo a la altura del primer bolo para que rodara con fuerza y tirara el mayor número posible de ellos y asi apuntarnos tantos para la final. Ha habido mas intentos fallidos que aciertos y aunque hemos tumbado unos cuantos boliches no hemos llegado a clasificarnos para las finales, pero otro año será, el gusanillo del gusto por este sano deporte nos ha calado dentro y solo nos queda encontrar una bolera donde poder entrenar y así el año que viene el premio estará asegurado. Aquí en la foto se ve el estilazo de nuestras habilidades y las de nuestras amigas Cloti y Elo en las fotos que nos ha tomado Luismari, que es un fotógrafo de primera porque ha sacado lo mejor de nosotros mismos al captarnos en esta pose tan estilosa de movimiento.
0 comentarios