Panama y su canal

Llegamos a una ciudad con 1.200.000 habitantes, moderna, llena de rascacielos, la Manhattan caribeña. Partimos desde Bocas de Toro, un lugar atlantico de mar y naturaleza a una moderna capital de país en aguas del Pacífico con mucha obra publica y creciendo a un ritmo del 6%, casi nada. Lo primero que nos impresionaron en el trayecto desde el aerpouerto fueron los perfiles iluminados de sus rascacielos pues ya era de novhe, algunos con mas de 90 pisos de alto. Llegamos al estupendo hotel American Trade enclavado en la plaza Herrera en pleno centro historico de San Felipe y tras refrescarnos y sentir el frescor de su aire acondicionado enseguida quedamos con Javi y empezamos a observar el ambiente tan animado y con mucha clase que hay por alli, se mueve mucho dinero y los sitios son diseñosos. Al dia siguiente fuimos de excursion al Canal y aunque ya lo habiamos visto en los documentales el ver en persona aquella obra de ingenieria tan inmensa te impresiona mucho. Entras en el centro de visitantes y tras exponerte una proyeccion en 3D vas subiendo por las 4 plantas del museo donde de manera interactiva te explican desde los avatares de su construccion en plena selva hasta los trabajos realizados para su pleno funcionamiento, acabando en una terraza cubierta desde donde ves las esclusas y una panoramica perfecta de toda la obra e incluso cómo van pasando los barcos. Es un canal construido aprovechando el istmo que un dia en época de Carlos V pensó horadar para hacerlo navegable, pero viendo la dificultad que entrañaba aquella selva y su visión religiosa del mundo diciendo que lo que Dios habia unido no tenia él que separarlo se quedó esperando su cnstrucción, hasta que tuvo lugar su inauguracion en 1914, aunque previamente Lesseps el ingeniero del canal de Suez durante 7 años estuvo intentándolo pero las dificultades de esa agreste naturaleza hicieron desistir a los franceses, y así pudieron entrar los americanos donde se quedaron hasta la devolucion del canal en 1999 con la administracion Carter. Ahora lo están ampliando de modo paralelo y ya se ha instalado una de sus mayores compuertas. Nosotros estuvimos justo encima de de Miraflores, con 100 años ya de antigüedad y por donde pasé cuando era pequeña cuando mi padre nos llevaba en el barco. Cerca está la esclusa de Pedro Miguel y al final saludando al Atántico está la de Gatún. En total son 84 km de navegación entre exclusas a 26 metros de altura pasando por lagunas navegables. Estuve pasandome un buen rato en una cabina que con ruidos, luces y movimientos simulaba el puente de mando de un barco donde en tiempo real enfilabas hacia la esclusa de Miraflores, esperabas a que subiera el nivel del agua y te incorporabas a la laguna. Se nos ha quedado pendiente hacer un crucerito que pasas el canal de lado a lado, asi que tendremos que volver pronto.