Apagando fuegos

Estas últimas semanas han pasado muchas cosas agradables, una de ellas fué la visita al Parque de Bomberos para recibir el reciclaje en emergencias y fuego real que los miembros del Equipo de Emergencias del trabajo debemos superar. La experiencia como era de esperar fue muy enriquecedora y repetimos los ejercicios con mas soltura y eficacia. No entiendo cómo no se imparte este conocimiento en las escuelas. Un incendio es algo muy serio y todo el mundo debería tener unas minimas nociones de cómo hacerle frente, lo mismo en primeros auxilios para saber qué hacer en casos de emergencia, aplicar una RCP, enfrentarte a un atragantamiento, una quemadura, un accidente, una inconsciencia, o por lo menos estar al tanto de lo que no debes hacer. Lo que ahora tenemos que aprender es a apagar esos fuegos que nos rodean como personas en familia, en el trabajo o en sociedad porque aquí sí que nos pillan improvisando y acabamos quemados, nadie nos ha enseñado a evitarlos o hacerles frente, no existen protocolos a seguir, su propagación causa mucho daño, suelen durar mucho tiempo y apenas hay agentes extintores que los apagen... quizás porque son de lo más difícil de abordar. Y siguiendo con el tema, la alegria sobre todo nos ha venido porque a Patricia no le apaga ningun fuego su salud y ya ha salido del hospital despues de más de 30 dias de estancia. Como es una valiente, ha sobrellevado estas cuarto largas semanas con una entereza ejemplar, ha vencido a su atacante con disciplina y voluntad y ha triunfado en esta prueba de fuego que la vida le ha puesto por delante. A partir de ahora y aprovechando el buen tiempo, iremos a dar grandes paseos para ponernos en forma y coger fuerzas.