Aniversario de boda

Ya han pasado 3 años desde que pasamos por el notario aquél primer dia laborable del comienzo de la pandemia para dejar bien sellada nuestra anhelada unión. Lo celebramos en casa, tal y como hicimos ese extraordinario día, donde todos los restaurantes y lugares de celebración debían estar cerrados. Menos mal que las tiendas de alimentación abrían, aunque en ellas sólo podía haber un cliente dentro. Esta vez repetimos aquél menú original y nos surtimos de marisquitos en el Orio y un rico jamón ibérico de la jamonería de al lado. Para beber, en vez de cava, abrimos la botellita de vino blanco de Ribera de Duero que los amigos le regalaron a Pedro por su cumpleaños y como es de esas botellas artísticamente diseñadas que da pena tirarlas, la reutilizaremos metiéndole dentro unas luces de led como otras que tenemos. De esta forma se convierten en unos cálidos adornos de interior para el invierno y luego en el verano, nos sirven para dar un ambiente sofisticado a nuestras cenas al aire libre en la terraza.

Las exquisiteces estaban deliciosas y nuestro aniversario llamado "bodas de cuero" nos hizo revivir lo felices que seguimos siendo después de haber disfrutado juntos estos 18 años. La verdad es que se nos han pasado el tiempo a toda velocidad.