Tranquilo mes de marzo

Este mes de marzo ha transcurrido afortunadamente muy tranquilo y feliz. Hemos asistido muy formales a nuestras clases de gimnasia, pin-pon, sudokus, cursos y conferencias presenciales y online de tecnología y finanzas, que son las que más nos gustan. También hemos estado a régimen de sopa de puerros durante 17 dias para conseguir unas analíticas satisfactorias y hemos tenido suerte, porque así ha sido. Ahora nuestro colesterol está por debajo de los niveles permitidos y como también el resto de los componentes han dado buenas mediciones lo hemos celebrado. Para ello nos regalamos un menú sidrería de los de raciones generosas con tradicional postre de queso y nueces. Comenzamos bebiendo un vino tinto riquísimo y la secuencia de platos no tardó en salir: unos potentes cogollos con anchoillas y bonito a la vinagreta, chistorra a la sidra, revuelto de láminas de bacalao y después la joya de la corona llegó muy humeante en plato de barro ardiendo. Lucía a lo grande, con sus patatitas y sus pimientos. Este txuletón kingsize, inmenso, jugoso y delicioso, no pudimos terminarlo....hasta el día siguiente. La comida fué gloriosa del principio al final y además, como hizo tan buen tiempo, pudimos comerlo al aire libre en la entrañable terraza del Ataria, un lugar muy especial para nosotros.
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