De Bodegas

Este mes de julio nos hemos dado una vuelta por Logroño. Hacía casi 2 años que no lo habiamos visitado y lo echábamos mucho en falta. Aprovechamos para visitar las bodegas Franco Españolas que no están mal, pero no nos impresionaron demasiado. Además andábamos un poco desangelados por los celosos motivos de higiene y seguridad que hay que guardar en esta horrible época que nos ha tocado vivir. El precio de las visitas ha subido mucho y los 3 vinos de las catas tampoco fueron de nuestro agrado. Después paseamos por las calles San Juan y Laurel y se notaba poca afluencia de gente y algunos sitios cerrados. Tuvimos la suerte de comer en un restaurante subido a una casa de alforja, en su segundo piso, el "De perdidos al Rios" y ahí sí que estaba buenisima la botellita de vino tinto que nos bebimos con unos platos muy ricos de apetitosa decoración, además de la amabilidad de su personal. Volveremos.
0 comentarios