La mili de Pedro en los Pirineos catalanes

Hemos estado unos dias en la zona de la montaña barcelonesa, alojados en Berga, en el mismo lugar donde Pedro hizo el servicio militar en 1980. Yo tenia mucha curiosidad por ver la zona donde habia hecho la mili mi querido boyfriend y viendo que el cuartel se habia convertido en un flamante hotel se animó a llevarme para allí. Las 6 horas de camino se hicieron muy fáciles porque es todo autovia y cuando dejamos Manresa de lado y empezamos a tomar direccion norte, las montañas picudas se iban dibujando a nuestro paso acercándonos hacia este paraje impresionante. Berga apareció por fin como una ciudad grande, con hoteles, mucho pequeño comercio, restaurantes y tambien con muchas cuestas por ser una ciudad montañosa. Nos dió la sensación de que esta gente está muy bien organizada y que saben lo que quieren a pocos dias del acontecimiento politico que desean vivir. El cuartel transformado en hotel nos recibió con su nueva modernidad y añoranza a la vez pues era fácil trasladarme mas de 30 años atrás con los relatos que me iba contando Pedro sobre el alojamiento y sus andanzas por allí. Muy duras por cierto, solo para valientes, como lo es él. La fachada del edificio principal se conservaba tal cual fué, con un dibujo en su fachada muy de su arquitectura local, el edificio donde él dormia ahora lo ocupan los mossos d’esquadra, las instalaciones donde alojaban a los animales son viviendas, la residencia de oficiales es ahora una residencia de abueletes, el polvorín está reconvertido en centros de formacion profesional y de aquella época se conservan los jardines, un buen cambio en todos los sentidos. En el hotel nos recibieron con mucha amabilidad y cuando se enteraron que Pedro hizo allí la mili, se interesaron mucho por él porque nos contaron que mas chicos que la habian hecho se habian acercado por el hotel para ver si seguía en pie aquello, por lo que habian pensado que sería muy interesante reunir algun dia a los licenciados que pasaron por allí, asi que anduvieron recabando informacion y Pedro les envió las fotos de su estancia militar porque se han propuesto recomponer la historia de los protagonistas de aquel acuartelamiento. Por otra parte decir que la gente catalana nos pareció muy amable. Comimos muy bien. Visitamos el Monasterio de Queralt con su virgen románica sonriente, que estaba justo encima de la ciudad de Berga pero a mas de 500 metros de altura por encima en picado y lo veiamos desde la ventna del hotel, asi que para llegar a él, algo que hacian los soldados habitualmente y además andando, tuvimos que subir miles de curvas con el coche. Todas las carreteras eran de montaña y te podias marear con tanta cuesta y curva de herradura aunque merecia la pena pasar esta penalidad porque el paisaje era maravilloso..., Ripoll, Olot, los pueblos de la Bergedá colgados de la montaña y de la Cerdenya como Puigcerdá pasando por la estacion de esquí la Molina nos parecieron espectaculares. Tambien visitamos la medieval Girona y su catedral de cientos de escalones con las casas de colores junto al rio. Al borde de una carretera nos vendieron una setas que nos aromatizaron el camino de vuelta y nos volvimos a casa con la intención de regresar pronto, pero yo en particular volví con el convencimiento de tener a mi lado a alguien a quien admiro todavia más porque aquellas duras y difíciles experiencias de superación que tuvo que vivir no son para cualquiera y estoy segura que mucho tuvieron que ver en la forja de la persona tan entera, responsable y buen compañero que es conmigo.