La comida en Dos Hermanas

El domingo fuimos a comer el menú degustación al Dos Hermanas. Este restaurante es muy elegante y caro y no nos lo podemos permitir, pero era una oferta comprada en estas empresas que hacen ofertas de ocio y si se llega a un número de compradores determinado, te ofrecen el servicio por la mitad de precio. Asi que para allá fuimos en un frio y lluvioso mediodia y degustamos lo siguiente: una fuente muy bonita alargada con 4 tipos de quesos portugueses de menos a mayor curación que tenian por encima aceite y kikos triturados, una vieira gratinada y unas manitas de cerdo rellenas de trufas y foie muy crujientes. Estaban deliciosas. El postre fue muy original: su versión de churros con chocolate: un chupito de liquido chocolate puro con unos churritos como dice Pedro, de la señorita Pepis. Muy original. El vino de año, ligero y muy fácil de beber. El ambiente pues un poco incómodo porque es de esos sitios que tienes que hablar en bajinis, estar muy tiesa, el servicio va vestido de trajes regionales, te guardan el abrigo, te ayudan a colocarlo y el vino te lo tienen secuestrado pues lo escancian ellos y esto a nosostros nos agobia porque nos gusta servirnos a nuestro aire. Después del postre al salir del restaurante nos reconfortamos respirando el delicioso aire fresco invernal. Tomamos café en el Ajuria disfrutando del techo dibujado y pintado por Mintxo y después, como somos unos pringaos, no se nos ocurrió otra cosa que pasar por el trabajo a acabar un trabajito pendiente, con la tranquilidad de que no suenan los teléfonos ni nadie te incordia. La satisfacción de acabar lo que te venia rondando en la cabeza desde el pasado viernes nos hizo llegar a casa muy satisfechos, no sin antes pasar por The Corner Pub y tomarnos una pinta de cerveza calentita y luego llegar a todo correr a casa para ver nuestra serie favorita: Criando Malvas, en la 2.