Nieve en el lago

Yo le llamo el lago porque me parece muy romántico. Otros le llaman el pantano, pero este lugar de ensueño tiene un encanto especial y cuando está nevado se multiplica su belleza. La nieve todo lo invade, el suelo y el cielo, el aire limpio y fresco y el silencio del momento. Todo se vuelve sobrecogedor. Pasear por sus orillas es casi imposible, por lo que los patitos tímidamente se acercan a la tierra y se adentran donde no pueden hacerlo en otra época dejando el testigo de sus huella marcadas. Y el lago sigue ahí, paciente, esperando la primavera. Con nieve o sin nieve siempre está precioso.
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